Y ganó el monstruo

Psé, ganó Macri nomás. Francamente, la noticia no me da ni frío ni calor. Noto que muchos se están rasgando las vestiduras como si fuera la gran cosa. No lo es. Ganó Macri, ganó Radio 10, ganaron los fachos, la izquierda perdió otra oportunidad y bla bla.

Ganó uno de los que ganan siempre!.

Y no es que se coló por el sopor de una sociedad dormida, Buenos Aires lo votó despierta, a sabiendas de que será perseguir de a poco a los cartoneros, desalentar la presencia boliviana, restañar la ola de negocios inmobiliarios (solo aparentemente cascada perdida la vigencia del menemato) y un montón de cosas feas que supuestamente la sociedad no merece... Las pelotas no merece! Merece a Macri y a cuanto dinosaurio baboso quiera subirse por la pila de embolados que va dejando la era K. No es éste un Jean Marie Le Pen que emerge cual forúnculo en un descuido. En todo caso los descuidos son demasiados como para ser distracción: absoluta ineficiencia del transporte porteño, cobijo de corruptos progresoides, crisis energética canalla, carencia de proyectos concretos que enfilen la nave hacia algún lugar concreto y definible.

QUÉ DIFERENCIA HAY ENTRE LAS VERSIONES DEL CAPITALISMO DE ESTOS SUJETOS?:

MENEM

DE LA RÚA

DUHALDE

KIRCHNER

Ganó Macri. Uh, qué macana. Todos los exMejide de Buenos Aires se quieren cortar las pelotas.

Filmus era mejor? Telerman? La experiencia del Frepaso, de la que todos parecen olvidarse, debería prevenirnos de los intelectualosos serratianos que parados en sus muchitos libros nos llaman a tragarnos cuanto sapo se les ocurre en nombre de la RealPolitik. A cagar con la responsabilidad del gobierno y los factores condicionantes. Estos blandengues no nos llevan a otra cosa que al capitalismo serio, que parece mas digestivo si viene con homenaje a las madres, la negra Sosa en el Salón Blanco y con Gieco asintiendo con la cabeza en los escenarios.

Otras opciones? No creo que las haya. Ni en ésta elección, ni en la presidencial. La izquierda partidaria argentina está muerta. Y en buena hora. Que quede el imbécil ególatra de Heller como mueca de su último estertor, y desde el duelo relativo (la enfermedad fue demasiado larga como para llorarla) nazcan pensamientos alternativos, antidogmáticos pero desde una buena cantidad de principios. Me hace acordar de esa frase de Marx (Groucho): "estos son mis principios, si no les gustan, tengo otros".

Para no hacerlo tan largo, prefiero al mismísimo Capitán Monasterio antes que al Sgto. García haciéndose el bonachón por un trago de vino en la taberna.

me voy canturreando la melodía de El Zorro (no la de presentación cantada, la de los momentos apacibles: taráaaaa trantan tan tan, con aire españólico).

Aparte estamos en Mar del Plata y acá está todo bien.