Gracias por visitar este pequeñín espacio de expresión. Es tanta la necesidad que ya creo que he puesto demasiadas cosas. Tenedmme paciencia.
Jorge
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Comentarios
Anónimo ha dicho que…
congratulationes per queste spacio. un abrazo, mauricio
Anónimo ha dicho que…
Ya era hora ,esperabamos este espacio ansiosamente.Falta Vanesa nada más. Nélida
Anónimo ha dicho que…
Querido Jorge Todo bien con el blog, pero seguiré con el grupo en el espacio de El Puente. Es cierto que, a lo mejor, es mas simple intercambiar mails con Maitena y los dos puenteros que acusaron recibo, pero me parece que El Puente es algo importante y, fundamentalmente, colectivo. Los blogs son individuales y aislados, los puentes unen y comunican Igual sabes que los quiero mucho, te mando un gran abrazo Osvaldo
Anónimo ha dicho que…
Carta desde el pasado
Un placer reencontrarlo por este medio de comunicación del futuro, viejo compañero de esta (mi época) de la no tan querida escuelita de periodismo en que todo es cortar y pegar de verdad, con tijera y plasticola (porque hasta la boligoma es cosa moderna). Deme tiempo para absorver tanto material publicado por Ud. Solo le digo que me sorprende su retrato: veo que el tiempo no hay hecho tanto estragos en su cabellera, incluso aún más larga. Su barba sigue intacta, pero me pregunto ¿que habrá sido de aquella vieja gorra de abuelo bueno que solia usar? Salute y felicidade signore
Pablo Spinelli
Anónimo ha dicho que…
ABSORBER O ABSORVER ? VERA QUE POR ACA LA BRUTALIDAD SIGUE SIENDO NUESTRO MÁS PRECIADO PATRIMONIO
P.S.
Anónimo ha dicho que…
Me enteré de tu blog y me dije: "Lo leo con tiempo el fin de semana...". ¡Recién entro y veo que escribiste sin parar! Mis días nunca tienen las horas suficientes. En fin, feliz estreno, qué bueno poder encontrarte por acá. Y largo la primera crítica: ¿podrían ser más grandes las imágenes de tus dibujos? Algunos estamos lejos para ir a la muestra... Salud y gozo, GabyF (esperando darle un desenlace al guión de la película del conventillo)
Gracias totales a Mauricio, Nélida (dejame que la convenza), Pablo (me resultaría raro no escribir Pablo y dejar de pensar en Pablito, pero me corrijo por decoro viejeril), Osvaldo (concuerdo con que esto es otra cosa y que debemos salvaguardar lo colectivo) y Gaby (para los 20 TENÉS que estar), los quiero mucho.
Anónimo ha dicho que…
Mucha "merde" con el espacio. De a poco lo iré leyendo y mandando comentarios de bueyes perdidos y encontrados. Ate mais... ;o)
Querida Seño Eugenia: Te agradecimos personalmente. Pero decido escribirlo, acaso para poder expresar mejor la dimensión de este “gracias”. Todos hacemos lo nuestro. Cada quien con su ocupación, con su trabajo, hace lo mejor que puede. A veces ponemos más ganas, otras menos. Y por cierto los agradecimientos no abundan, no es más ni menos –entendemos- que la responsabilidad que nos toca. Pero a vos sí queremos decirte gracias. Porque de todos los trabajos que existen, el tuyo tiene que ver con nuestra mayor riqueza: nuestros hijos. Y cada día del año dijimos gracias. Hoy, ya en la despedida, juntamos esas gratitudes para que te las lleves, para que tengas constancia de vos misma, de lo que pudiste generar en cada una de nuestras familias. Son pequeños gestos, tal vez. Contarnos que “hoy le dolió la panza”, que “hoy no quiso hablar”, que “se siente triste”, que está contento. Pequeño reporte cotidiano de nuestros pequeños, desde alguien
Para comer un durazno maduro acaso primero deba proveerse de un babero grande o tener una toalla a mano o desnudarse el torso. Porque es una fruta destinada a manchar la ropa y a llenar la cara, barba, dedos con su generoso y abundante jugo. Coloque el durazno sobre una superficie despejada y dedíquese a observarlo sin tocar. Perciba primero su perfume, deje que penetre en sus fosas nasales para acondicionar el ambiente de los sentidos con su dulzura etérea. Después observe la fina armonía de su forma. Desintegre el todo llamado durazno en una multiplicidad de partes y atiéndalas en particular. Primero el color. Estamos hablando de los duraznos amarillos, de piel aterciopelada y hueso no adherido a la carne. Fragantes. Blandos pero turgentes, con el color justo que la naturaleza pinta para llamar a los comensales, sean estos hombres o bestias. Es indefinible este color, tanto que en sí mismo es referencia dentro de la paleta de la naturaleza. Puede variar en sus partes más vo
Ciertamente podría referirme a las elecciones, al precio de la calabaza o contar el choque del lunes. No obstante, he descubierto que lo que más me motiva es indagar acerca del sentido de la vida, filosofar de a pie, hacerme las mismas preguntas que siempre nos hemos hecho. Una frase que siempre repito: para quien no sabe adónde va, nunca soplan vientos favorables . Recientemente me topé con un contra apotegma: ir por allí sin rumbo, es la mejor manera de conocer lugares nuevos. Pero de una cosa estoy convencido: mientras uno no sepa cuál es exactamente el norte, todo lo que ocurra revestirá el carácter de accidente, sean buenas o malas todas serán sorpresas. La vida es impredecible como el mar y es bien complicado caminar sobre sus aguas.
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Todo bien con el blog, pero seguiré con el grupo en el espacio de El Puente. Es cierto que, a lo mejor, es mas simple intercambiar mails con Maitena y los dos puenteros que acusaron recibo, pero me parece que El Puente es algo importante y, fundamentalmente, colectivo. Los blogs son individuales y aislados, los puentes unen y comunican
Igual sabes que los quiero mucho, te mando un gran abrazo
Osvaldo
Un placer reencontrarlo por este medio de comunicación del futuro, viejo compañero de esta (mi época) de la no tan querida escuelita de periodismo en que todo es cortar y pegar de verdad, con tijera y plasticola (porque hasta la boligoma es cosa moderna). Deme tiempo para absorver tanto material publicado por Ud. Solo le digo que me sorprende su retrato: veo que el tiempo no hay hecho tanto estragos en su cabellera, incluso aún más larga. Su barba sigue intacta, pero me pregunto ¿que habrá sido de aquella vieja gorra de abuelo bueno que solia usar?
Salute y felicidade signore
Pablo Spinelli
P.S.
¡Recién entro y veo que escribiste sin parar! Mis días nunca tienen las horas suficientes.
En fin, feliz estreno, qué bueno poder encontrarte por acá. Y largo la primera crítica: ¿podrían ser más grandes las imágenes de tus dibujos? Algunos estamos lejos para ir a la muestra...
Salud y gozo,
GabyF
(esperando darle un desenlace al guión de la película del conventillo)
Ate mais... ;o)