La fiesta, la contrafiesta
Cuando estalle la última burbuja del hombre hecho de burbujas con el corazón podrido de carbón, cuando se disipe la nube de polvo que deja a su paso demoledor, cuando nos lavemos la cara con el agua de empezar de nuevo, cuando la noche no sea una travesía, conciliemos el sueño, equilibremos nuestra caja de ritmos toráxicos, no nos mate una factura de la luz, no nos duela este dolor sin remedio. Te espero con crayones, acrílicos y cartulinas, te espero con guitarras, con bajos y flautas traversas, te espero a danzar entre los escombros, te espero a desenvolver ilusiones que parecían muertas, para celebrar la sorpresa de haber sobrevivido. Quiero que nos odien como nunca, los quiero como caracoles manando espuma, indignados arrancándose la piel, mascullando, maldiciendo, agitando sus paraguas, quiero a Mirtha enojada aunque sea en forma de marioneta. Que digan arriba que se cerró la grieta, que digan lo que quieran, que inventen escenarios de todas las manos. Para mí no hay f